Tucumán siempre fue una cuna de talentos deportivos y uno de los casos es el de Alejandro Mónaco. Se trata de un niño de ocho años amante del motocross que ya empezó a destacar por su gran técnica dentro de la pista.
Sus inicios fueron cuatro años atrás donde por medio de internet encontró el deporte que se convertiría en su gran pasión. “Veía videos en Youtube”, dijo al comienzo de su idilio. “Vengo primero en el campeonato cordobés y en el campeonato argentino”, recordó el niño que aseguró que para practicar este deporte se necesita mucho entrenamiento. “Tenes que saber doblar bien y sacar bien los pies”, dijo en relación a las claves de la disciplina.
Asimismo, anticipó que no se trata únicamente de saber dominar el vehículo. “Tengo que ir al gimnasio. Voy los lunes, miércoles y viernes. Desde las 7 hasta las 8.30. Hago pesas abdominales, trotes, piques. Hago de todo”, contó.
Para dedicarse a la disciplina, ‘Ale’ debe dejar ciertas actividades recreativas de lado. “Si es el campeonato argentino, viajó a Salta, Buenos Aires y recién vuelvo los domingos a la noche. Me pierdo algunos cumpleaños, pileteadas o una invitada a dormir “, dijo. A pesar de ello, el niño tiene en claro cuál es su sueño: “Quiero ser campeón argentino y ser el mejor del mundo”.
¿Qué dijo su padre?
Su padre, Ariel Mónaco, es el mecánico de su moto y el encargado de llevar a ‘Ale’ para competir fuera de la provincia. Según explicó, el niño debe estar lo mejor preparado posible para enfrentar este tipo de competencias. “Ale tiene un entrenador en Catamarca. Uno en Córdoba y otro en Tucumán; hoy le están enseñando los mejores. Es un deporte de alto riesgo, si él no esta bien preparado puede tener un accidente. Lo ideal es que este bien físicamente y mentalmente”.
“Somos conscientes que es medio peligroso, pero en los dos años y medio que llevamos nunca vimos que un niño haya tenido que ir a urgencias. Ellos son livianitos y los impactos no son tan fuertes como un grande. La velocidad de la moto tampoco es tan alta. Serán 60 kilómetros por hora”, agregó.
En relación al lugar donde entrena, Ariel aseguró que la construyó en el terreno de su amigo. “La hice yo con un grupo de amigos. Teníamos esta propiedad que es de uno de los chicos y decidimos hacer un circuito para que entrene ‘Ale’”, contó.
Por otro lado, comentó que todo los insumos de los vehículos son a precio dólar. “Tenemos una ventaja sobre los otros equipos que hacemos íntegramente la moto. Motor, suspensiones, todo. Eso es economía para nosotros. Solamente necesitamos los repuestos”.